Ginny Soskey

Taller Literario de Salinas
El tratoErase una vez un ni de cualquier barrio m de Kosovo. Hoy se ha levantado pronto, es Navidad. La v se empe en dejar sus zapatos junto a la ventana. playeros asics mujer Su madre no le dijo nada cuando, unos d antes, le vio preparar una carta para Pap Noel y pedirle una bici (desde que han vuelto de aquel otro pa su madre nunca dice nada, se limita a llorar en silencio); su hermano mayor, como siempre, apenas si le hizo caso; su padre, sin embargo, se puso muy serio al recordarle que ahora todo hab cambiado para ellos, que Kosovo no era Alemania y que ten que ser razonable. Claro que sab que el barrio infame, donde ten que malvivir ahora, no ten nada que ver con su otro pueblo, all en Baviera, all de donde le dec que no era, pero donde hac apenas seis a hab visto la luz por primera vez. asics de vestir S lo entend hab sido repatriados (era una palabra muy complicada que no le gustaba al ni ahora que la guerra hab terminado y hab vuelto al pa al que pertenec aunque verdad Kosovo era el pa al que pertenec verdad exist un pa para el pueblo gitano?
El ni se acerca a la ventana no est la bici, s sus zapatos de suela despegada aguardando como dos pobres centinelas. De repente el peque oye ruido en la calle y pega la nariz contra el cristal helado; el vaho de su respiraci ha formado como una aureola; en ella y en la semiclaridad del d que nace, el ni ve, saliendo de un coche negro muy lujoso, a un hombre envuelto en un abrigo de cuero que le llega hasta los pies. Oye la puerta que se abre. Oye a alguien dejando algo junto a sus zapatos al pie de la ventana. Oye la puerta que se cierra. es una bici y es roja.
En la calle, el hermano mayor del ni ha vuelto hac el coche, se despide en silencio del hombre del abrigo de cuero; antes de desaparecer en su trineo negro el hombre le susurra:

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